Ya han transcurrido un par de meses desde el fin de soporte de Windows XP por parte de Microsoft y es posible sacar un par de conclusiones sobre el tema.
En primer lugar, según los últimos datos lanzados por la encuesta de sistemas operativos, que analiza el porcentaje de usuarios que emplean las distintas plataformas disponibles en el mercado, Windows XP sigue manteniendo un importante 25% de cuota de mercado en el sector empresarial. Durante las últimas semanas se ha instado a las diferentes empresas a migrar todos sus equipos a nuevas versiones de sistemas operativos, con actualizaciones disponibles y mejor preparados ante amenazas externas. Resulta evidente la necesidad de adecuar el hardware a las nuevas necesidades de los sistemas operativos más modernos, y en ese sentido en la mayor parte de los casos se hace imprescindible una inversión en nuevos equipos que permitan correr Windows 7 u 8 con agilidad en el sistema.
A pesar de la dificultad y exigencia de realizar una inversión importante en nuevos equipos informáticos, las ventajas que se generan de este tipo de actualizaciones son palpables. Cabe destacar el aumento de rendimiento y productividad que experimentan los empleados de las compañías en general al migrar a un sistema operativo que resulta menos propenso a errores, y si estos se producen son más fácilmente subsanables, con la consecuente reducción en tiempos de espera de reparaciones o configuración de equipos. Por otro lado, es indudable que a medida que avanza la tecnología los nuevos productos que se lanzan al mercado están más preparados ante los nuevos peligros de los ciberataques. Sin ir más lejos, la aparición masiva de ataques a equipos con sistemas operativos Windows XP fue anticipada por los expertos, precisamente por la inexistencia de soporte oficial de actualizaciones y parches de seguridad por parte de Microsoft, y no se han hecho esperar recientes amenazas aprovechando esta situación. Tanto es así, que Microsoft se ha visto forzada a publicar un parche con actualizaciones de seguridad para equipos con XP en las últimas semanas, a pesar de estar ya hoy en día fuera de soporte, por lo que es lógico no esperar nuevos parches en un futuro. Añadido a todo lo anterior, no debemos olvidar que los programas dejaran de ofrecer soporte para XP en las próximas versiones, según su papel en el mercado vaya disminuyendo.
Por todo lo anterior, a pesar de ser un sistema con 13 años de antigüedad y de sobrada reputación en el mundo empresarial, resulta una temeridad por parte de las empresas mantener estos equipos sin mantenimiento oficial a partir de ahora, convirtiendo esos parques informáticos anticuados en objetivos indefensos de ataques externos, más aún si nos ponemos en la piel del atacante, que considera el importante número de PCs con este sistema y la poca alerta que mantendrán los desarrolladores para corregir errores. Por ello recomendamos a las empresas ponerse en contacto con un servicio de mantenimiento informático como Tecnoderecho Sistemas, que se encargue de actualizar, montar y configurar los nuevos sistemas de su empresa de la forma más profesional.