Para la mayoría de las empresas con presencia en Internet crear un vínculo entre su página y los visitantes es uno de los mayores retos que deben afrontar tecnológicamente hablando. Existen diferentes métodos para establecer un contacto directo entre cliente y empresa a través de la web, pero uno de los más comunes es el registro de usuario. En este caso, el visitante nos proporciona sus datos y nosotros ofrecemos al usuario notificarle de promociones y ofertas exclusivas, en general información privilegiada sobre nuestra empresa.
Para conseguir este propósito es importante ofrecer algo tentador para el usuario y que reciba una experiencia de registro atractiva. Cualquier tipo de promoción o ventaja tan sólo para nuevos usuarios que se registran puede ser suficiente para captar visitantes que nos den sus datos y convertirse así en subscriptores. En este sentido es importante ofrecer al posible subscriptor algo que las demás webs no ofrezcan al registrarse. Acceso a contenido exclusivo, promociones personalizadas al email, descuentos iniciales para nuevos registros… dependiendo del sector de nuestra compañía el abanico puede ser más o menos amplio. Es muy probable que si conocemos en profundidad nuestro modelo de negocio se nos ocurran múltiples ideas para diferenciarnos de la competencia y ofrecer algo apetecible para el nuevo usuario registrado.
La clave para fidelizar estos nuevos usuarios es aprovechar la información que nos brindan para ponernos en contacto con ellos por diferentes motivos. Si se reflexiona sobre ello, nos damos cuenta que en la mayor parte de los casos, se trata de una persona que ya está interesada en nuestros productos o servicios, y está dispuesta a ofrecer su información personal y permitir que se contacte con ella. Es, a todas luces, un cliente potencial, y con este enfoque, los usuarios registrados representan un target muy concreto y con predisposición a la compra. Debemos hacer sentir al subscriptor que las newsletter o información promocional que enviamos son claramente una prioridad por encima del resto de clientes o visitantes. Así pues, se intenta transmitir esta idea a base de proyectos como descuentos exclusivos, o periodos adelantados de rebajas para los registrados. Todo ello aumenta la sensación del subscriptor de que esa situación no sería posible en ningún caso si no hubiese dado el paso de registrarse.
Ahondando en este tema, la disponibilidad de datos concretos de los usuarios nos permite segmentar y personalizar al máximo nuestras ofertas para ellos, de forma que se ajusten a sus necesidades y conduzcan a compras prácticamente aseguradas. El proceso no termina una vez enviado el formulario de registro por parte del visitante, sino que esa relación debe mantenerse y reforzarse en el tiempo mediante el esfuerzo de contacto de la empresa. Se trata de mejorar la atención al cliente del resto de la competencia y, de nuevo, conseguir que esa persona considere que se le está tratando de manera especial por ser usuario registrado. En estos casos no lanzamos información de manera indiscriminada, sino que conocemos más detalles sobre los gustos y afinidades del destinatario de la oferta, hecho que nos sirve para focalizar nuestros esfuerzos de venta sobre los productos o servicios que más le puedan interesar al usuario en cuestión.
En conclusión, los pasos a seguir son claros: establecer un sistema de registro sencillo, rápido y atractivo; ofrecer una ventaja diferencial a los nuevos usuarios registrados sobre el resto de visitantes y reforzar constantemente esa relación o vínculo comercial con ofertas personalizadas y promociones. Por último, no olvidemos que un subscriptor contento con nuestra web es el mejor recomendador de todos, podrá dar su opinión positiva sobre nuestras ofertas a amigos, conocidos y familiares.